4º domingo de Cuaresma
Jn 3, 14-21
-Ya sabes lo que es la luz y lo que son las tinieblas.
¡Jesús habla aquí de la luz y de las tinieblas que
habitan nuestro corazón!
Intentemos esta semana ver un poco más claro.
Cuando se deja paso a la luz,
se ve claro todo, lo que nos rodea.
Cuando se prefieren las tinieblas,
la casa se nos llena
de duda, mentira, engaño…
Jesús, haznos amar la claridad,
la luz , la verdad.
Cuando nos atraen las tinieblas,
entonces, en nosotros brota
el mal, las acciones que ocultamos…
Jesús, haznos amar la claridad,
la luz y la verdad.
Cuando nos volvemos a la luz,
entonces hay en nosotros
mucho espacio para todo lo bueno.
Jesús, quiero acercarme a tu
resplandor;
descubriré entonces hasta qué punto
Dios está presente en todo