En el marco incomparable del retablo mayor de la catedral de
Sevilla tuvo lugar el domingo noche la clausura del MES MISIONERO EXTRAORDINARIO
presidida por nuestro Obispo Auxiliar. El Delegado Diocesano de Misiones
Eduardo Martin Clemens agradeció a todos los que con su oración y trabajo han
convertido este mes de octubre en MES EXTRAORDINARIO con la intención de que
perdure en el tiempo.
“nunca pude sospechar el potencial misionero de nuestra
Archidiócesis y de la respuesta tan positiva que se ha obtenido de parroquias y
comunidades” después de este MES MISIONERO EXTRAORDINARIO convocado por el Papa
Francisco.
Igualmente, señaló que “este ardor misionero ni se clausura nunca ni
puede acabarse porque es el que convierte a la iglesia de Cristo en una
“iglesia en salida”
Se creó un Comisión Extraordinaria en el pasado mes de enero
que desde el primer momento se volcó para hacer realidad los deseos del para Francisco
y el sueño de nuestro Arzobispo y su Obispo Auxiliar “
Bendigamos al Señor por tantos bienes recibidos a lo largo
del MES MISIONERO EXTRAORDINARIO en toda la Archidiócesis. A vosotros un
agradecimiento profundo por vuestra entrega y disponibilidad.
Hemos sembrado
pero no nos toca recoger los frutos ni lamentarnos de los fallos porque la
perfección solo pertenece a Dios. Espero que no sea un paréntesis sino que
amemos y sirvamos a la iglesia como ella quiere ser amada y servida”.
Con estas palabras, en la monición de entrada, comenzó la
Eucaristía de clausura.
Toda la liturgia estuvo animada por la coral de la
catedral dirigida por el ilustrísimo señor D Herminio Barrionuevo y acompañando
al órgano el Padre Navascues.
Juan Antonio Martin, responsable de medios de las OMP y de la Delegación Diocesana de Misiones
