PLENITUD DE VIDA
Has probado el sabor amargo de tus esclavitudes. Sabes por experiencia qué mal se pasa cuando, falto de aire, te ves ahogar o te sientes desnortado. Abre a Cristo las puertas de tu vida: nada te quitará y todo te lo dará. Si le acoges en tu casa, te enseñará paisajes de verdadera libertad. Tendrás futuro, pues te ayudará a superar toda muerte. Orientado por Él, caminarás seguro por el sendero que conduce a una vida de plenitud sin fin.
Linus
Familia Mariannhill