El 37% de la Iglesia católica es Territorio de Misión: iglesias
jóvenes que no pueden subsistir por ellas mismas y que dependen de la ayuda
espiritual, personal y económica de las Iglesias de más arraigo.
Como fruto del esfuerzo de los misioneros
que siembran el Evangelio con su vida, brotan vocaciones autóctonas que
certifican que la fe se ha arraigado en la cultura local. Estas vocaciones
representan el futuro de esas iglesias jóvenes, y facilitan el anuncio del
Evangelio y la acción de la Iglesia entre sus compatriotas. Con ellos comparten
la lengua, la cultura, las inquietudes... Incluso tienen más facilidad de
movimiento en las zonas donde la Iglesia es minoría, y pueden acceder a
licencias de construcción de parroquias, escuelas y hospitales con mayor facilidad
que los misioneros extranjeros. Los misioneros están llamados a dejar las
riendas a las iglesias jóvenes, para que la Iglesia camine y crezca; y para
ello son esenciales las vocaciones.
Pero, ¿cuántas son? ¿A qué
realidad se enfrentan? A continuación mostramos en paralelo los datos
estadísticos de las vocaciones en la Iglesia universal, y las vocaciones que
surgen en los Territorios de Misión.
Si se comparan
ambas tablas, se puede deducir que:
- El 37,20%de las
circunscripciones de la Iglesia Universal son Territorios de Misión
- Un sacerdote en los Territorios de
Misión atiende a casi el triple de personasde media que la
media de los sacerdotes de la Iglesia Universal.
- El 26,53% de los religiosos del
mundo están en estas circunscripciones
- Un tercio de las vocaciones al
sacerdocio se encuentran en los Territorios de
Misión
- Uno de cada tres seminaristas del mundo
se forma gracias a la ayuda de la Obra de San Pedro Apóstol.
Las zonas de misión suelen
ser muy pobres, por lo que las vocaciones que
surgen se encuentran con el problema de que no pueden seguir la llamada
de Cristo por falta de recursos económicos. Obras Misionales Pontificias es
la mejor herramienta para ayudarles. El próximo 17 de abril será la Jornada de
Vocaciones Nativas, con la que puedes ayudar y apoyar a estas vocaciones, y así
también, al futuro de la Iglesia.